Sumándonos al proceso de reflexión que encabezan distintas organizaciones, realizamos un encuentro con el equipo de CIS, donde revisamos nuestro rol como ciudadanos, así como nuestras decisiones políticas en la construcción y funcionamiento de la democracia.

En momentos en que Chile vive un punto de inflexión, las empresas necesitan adecuar sus estrategias y acciones mirando más allá del corto plazo. El entorno se ha vuelto cambiante y no cabe duda que post 18/10 será necesario adecuar muchos propósitos institucionales. Los nuevos tiempos demandan una mirada y actuar rigurosos, y será necesario aportar experiencia profesional para abordar este nuevo contexto.

En esta instancia concordamos que todos somos stakeholders del Estado, pero con distintos “sombreros” como ciudadanos, clientes, proveedores y dueños.

Junto con lo anterior, como ciudadanos tenemos ciertos derechos como la libertad de expresión, de creencias y de vivir libres de miedo. Como consumidores exigimos servicios de buena calidad (en el tema de seguridad, por ejemplo), como proveedores generamos trabajo remunerado, en tanto que como dueños exigimos “valor social neto” en áreas como defensa, transporte, infraestructura y medio ambiente.

La crisis que Chile enfrenta desde mediados de octubre hace que los roles de clientes, proveedores y dueños se analicen en una nueva realidad-país, y aquí está el desafío en el corto, mediano y largo plazo.